Amigo del alma, ante todo, no llames caridad a lo que es acendrada ternura. Tratándose de ti no distingo de acciones, y lo mismo que te abro los brazos te velaría enfermo o te ayudaría en el trabajo literario. Bien sé, ¿y por qué me lo dices? que nada premeditaste ni en ningún agravio pensaste. En ti no cabe nada malo, ni te alcanza responsabilidad alguna, ni necesito yo otra cosa que esa dulce frase "he dormido bien".
"Miquiño mío" Cartas a Galdós. Edición de Isabel Parreño y Juan Manuel Hernández
Ed. Turner
Carta desde París. 1889
La casualidad hizo que llegara a este libro hace unos días por una reseña en un periódico, que me fijara en su autora y la reconociera como una antigua compañera de trabajo con la que hace tiempo había perdido el contacto, y que una vez restablecido este me diera cuenta de que tenemos amigos comunes en la blogosfera -de distintos puntos del país- a los que conocemos personal o virtualmente desde hace años.
El mundo es un pañuelo...y pequeño.
Felicidades, Isabel.
43 comentarios:
Ay! Cuánta ternura me dio ese "dulce vidiña". Me entró morriña de antiguas relaciones epistolares, y de escribir "amigo del alma", o sencillamente "amigo mío".....En fin, una carta es una mano tendida...Me apetece este libro. Bico, Blue.
Vera, está recién salido del horno. Lástima que no contenga cartas de Galdós para saber qué decía él.
Bicos.
Si, ya ves, hay que tener mucho cuidado con quién se cartea uno no sea que surja el amor y entonces la hemos cagado, antes o después, claro...jajaja
Besos y salud
Genín, ¿y esa prudencia?, jaja.
Besos y salud.
Sip, sí que lo es (jaja) ;-)
Un abrazo.
¿Verdad?, imagina que hubiera estado posteando en su blog y después de años descubro que conozco a esa persona anónima de la que ya he construido una imagen. Eso iba a ser tremendo, jaja.
Un abrazo.
La ternura de las cartas. Derretí. Un abrazo.
Las cartas, eso que ya no existe.
Un abrazo, Darío.
Me encanta que de relación íntima, cuando acaba, que puede ocurrir, pasaran a una profunda amistad....me encanta.
Las cartas tienen su magia.
Besos
Qué preciosidad.
"Los nuditos del querer"
Creo que no hay ninguna como la Pardo Bazán, precisamente tengo yo en la mesilla sus Cuentos sangrientos.
Y yo también quiero ese libro, ya te dije una vez cómo me fascina la literatura epistolar. ¿Las cartas de él? Las cartas de él no importan (apuesto que hubo 1 por cada 20 de ella; siempre es así)
Qué manera de adjetivar, qué manera de enverbar, y qué manera de querer. Huy, sí, sí: ese libro lo quiero.
Besuchón azulona, como siempre, nos has dado bien de merendar.
Sí, a mi también me gustó lo de los nuditos. Y bueno, tú eres miquiña ¿eh?, que un mico es un gato, jaja.
Pues no sé cómo serían las de él. De todas formas si se conservan las que ella le envió es porque él las guardó. Y la biblioteca de "dona Emilia", enorme (la biblioteca y ella), fue donada junto con el Pazo de Meirás a los Franco. A saber si ellos las tienen o qué. Esto es lo único que se conoce.
Bicos, gatiña.
Carmela, que me olvidaba de tí, jaj, pues no sé de qué depende que se termine en amistad o no. Será que hay maneras de querer.
Bicos.
¿A los Franco?
No creo que ellos tuviesen esas cartas... Carmen Martinez Bordiu ya las hubiese vendido.
Voy a preguntar a algún hidalgo gallego si sabe algo de esto...
(No obstante, lo mismo ella no quiso que nadie las encontrara, y las escondió)
Por cierto, se me ha olvidado decir, que yo todavía espero mi noche de Frankfurt (de la cual solo conozco el aeropuerto.) (Me refiero a Frankfurt). (De la noche, el aeropuerto sería yo)
Otro besuchón.
El gato escaldao, del agua fría huye y cuando es gato viejo, mas ainda...jajaja
Besos y salud
O pueden estar esperando a que se revaloricen. ;-)
Pues leí en el libro que precisamente después del viaje a Alemania (aunque ya se habían visto muchas veces), la cosa se enfrió.
Bueno, y ella fue más golfa que él, pero ya no digo más, jaja.
Bicos e boas noites.
Genín, me decepcionas, jaja, creí que era al revés.
Aínda tes moita corda...
;-)
bueno jajaja al menos me viste, en el anterior hasta mi comentario desaparecio :(
No te decía que qué puede ocurrie, sino, que puede ocurrir, y que me gusta que despues de una relación íntima si se acaba perdure la amistad, cosa que no es fácil.
pero bueno Gata y Genín están sembraos
¿En la entrada anterior?, pues lo tengo enlazado al mail y no me suena de haberte leído. Bueno, a veces parece que se publica y no es así, también me ha pasado.
Sí, te entendí y claro que es lo ideal. Si perdura como amistad no sé de qué depende, supongo que ya existiría antes aún revestida de otra cosa. Sería aquella que Aristóteles decía que era perfecta, la "amistad en la virtud", ¿yo qué sé?, jaja.
Besos, Carmela.
Solo una carta de Benito. Este hombre era un poco gandul. Desde luego, la igualdad no existe porque es una quimera. En cualquier relación que se precie, siempre hay una parte que da más que la otra; o menos.
¡Buen fin de semana, Blue!
Cabrónidas, claro que las hubo, pero no se conservaron o no se sabe donde están. De todas formas, como dije más arriba, si se conservan las de ella es porque el destinatario no las quemó, jaja.
Buen fin de semana.
Benitiño (bonitiño) tuvo miedo: he oído decir que doña Emilia "era moita muller para un home solo" (¿Viches? ahí tiña sentido levear acento ou non...)
Mariajesus, pues vas a tener razón porque esto es para asustar: "rabio también por echarte encima la vista y los brazos y el cuerpote todo. Te aplastaré."
Si ou non?, jaja.
Bicos.
Conozco a la Bazán, pero nunca leí nada de ella,lo mismo él. Los epistolarios son literatura "aparte" y que interesante resultan,verdad?.Increíble lo de tu "casualidad", y sí....el mundo es un pañuelo.Un beso
Bueno, ella fue la primera catedrática de universidad española y Galdós un grande.
Las casualidades vinieron encadenadas y mi sorpresa fue mayúscula, jaja.
Besos, Fio.
A mi Galdos me encanta, su forma de contra las cosas me parece muy acertada, no soy critico literario, pero me encanta. Un saludo azul..
Tengo en casa Fortunata y Jacinta, será hora de leerlo entonces. De la Bazán hay mucho en la red para leer también. Un beso
Si es que nuestras mujeres son "demasié": mira doña Concepción Arenal (conchiña de mar)... y doña María Pita, lo valiente que era, con ese apellido...
Temujin, tenía "xeito" y contundencia también.
Besos.
Fiorella, también están bien los Episodios Nacionales, y de total actualidad, además.
Besos.
Mariajesús, pocas pero rufas, jaja.
Bicos.
Que lindo! me llené de dulzura y un poquitín de nostalgia. Las cartas agonizan hoy, la tarde noche está nublada, los pensamientos se me vinieron en picada sobre el corazón y sólo concluyo que aunque sin dudarlo debe ser una recopilación hermosa, preferiría no hacerlo, no sé; va a saber Ud. las cosas que me despertaron esas palabras tan llenas de miel pura; la intimidad de dos almas, la tinta impregnada en el papel por tanto tiempo, el recorrido de un sentimiento hasta su destino, la piel, el corazón expuesto...
Abrazo de fin de semana! me quedo con la piel capa por capa fileteada de emoción :)
Yeka, qué dulciña eres.
Y ya no te digo más porque el resto sobraría.
Un abrazo. O varios, capa por capa.
Gracias Blue... Caray qué de comentarios y fans tienes... más que doña Emilia jajajaja. Bueno, tengo que aclararos que Galdós sí le escribió y mucho a Miluchiña, pero efectivamente, los Franco hicieron "limpieza" en Meirás al tomar posesión y quemaron muchos papeles, no sólo cartas (es posible que estuvieran las de Galdós entre ellas) también diarios íntimos y anotaciones varias. Lo más problable es que se hayan perdido que si no... ya me hubiera gustado a mí incluirlas en el libro...
Ah... y por cierto, Galdós fue muy, pero que muy golfo... mucho más que la Pardo, aunque su proverbial discrección hizo que no quedase memoria de casi ninguna aventura.
Y sí... el mundo es un pañuelito diminuto.. Besos y abrazos
Hola Lula, jaja, ya son más de cuatro años de blog y se va tejiendo una red de amigos, dentro y fuera de aquí.
Gracias por contarnos eso porque ya ves que aquí estábamos especulando sin enterarnos mucho.
Aparte del resultado supongo que habrás disfrutado con el proceso ¿no?, lo digo porque es un trabajo como el de un arquéologo cuando desentierra un tesoro, lleno de sorpresas.
Por cierto, el prólogo me encantó.
Mucha suerte con el libro...y un abrazo.
Bueno, y que vengan más detrás de este.
Sí, la red propicia encuentros (y desencuentros) estratosféricos; el reto -con los primeros- es luego mantenerlos.
Y sí, el mundo es un pañuelo... al que ya le va tocando pasar por la lavandería, ¿no?
Saludos
Gatopando, esto daría para otro debate, pero como dice Marcela (no sé si así o algo parecido) a veces encontramos lo que ya estábamos buscando. ¿Desencuentros?, claro, como en la vida real.
El pañuelo...sí, la verdad es que no está de muy buen ver.
;-)
Saludos.
Lo siento, como hacía tiempo que no te veía por casa de TEMU, te perdí la pista ( a lo mejor estabas y como entro a la carrera no me fijé:-) ahora te encuentro a quí rememorando un encuentro con una antigua amiga que ha editado esta preciosidad de libro... no lo he leído pero he leído varias reseñas de él y solo por el pedazo que comentas ya se ve de qué pasta está hecho... enhorabuena para ella y para ti por reencontraros y enhorabuena también porque he visto de reojo todo lo que me he perdido en las entradas anteriores y se te ve enamorada hasta las trancas jajaja lo cual me alegra muchísimo, jamás existirá un estado que mejore ese.. sobre todo si como parece en tu caso es de verdad de la buena:-)
Un beso grande BLUE y feliz semana.
Hola, María, sí, siempre voy pero no siempre comento, jaja.
Ya ves, otra gallega con la que volvía conectar.
Enamorada...bueno, es que si hablo de política me cabreo un poco. Esto es como un refugio, jaja.
Un abrazo.
Siempre me gusto este libro por eso te lo regalo..
Gracias, Temujin.
Me pasa al menos, que me resulta mucho más fácil escribir mi voz más sincera que decir ciertas cosas en voz alta. Puede que sea cobardía.
Una carta hermosa.
Y qué bueno que recuperaste una amiga, Blue.
El mundo es un pañuelo y mucho más pequeño desde que existen Facebook y Blogger.
Besos tiernos.
(¿Ves? Besos tiernos es algo que jamás te diría en voz alta, jajajajaaja)
Bueno, a mí también me ocurre algo parecido, no creas, así que aprovechemos y...besos tiernos, jajaja.
No hay nada como las cartas de amor, y las mejores como decía Pessoa deben de ser ridículas, que es un concepto maltratado. Ridículo nunca es algo que sale de verdad y se dice por amor. Me había perdido la entrada. Yo, que soy una enamorada del amor y más todavía del amor epistolar.
Creo, me lo dijo alguien que vivía en una biblioteca, que él era un cursi.
Besos tiernos,al igual que Maia.
Marcela, eso creo, que lo verdadero nunca es ridículo.
De las cartas sólo deduzco que era bastante débil y enfermizo, pero lo de cursi...jajaja, me mataste.
Besos "tenros".
;-)
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