miércoles, 18 de febrero de 2015

Arrinconando aromas


Manuel Álvarez Bravo


Todavía hoy me pasa que detecto el perfume de mi primera novia en el aire, como uno de esos perros viejos que mantienen alerta un cierto sentido de la nostalgia y gimotean desde el fondo del tiempo. Ensombrezco la mirada y me consiento unos segundos de abatimiento mientras miro fijamente a la chica que lo lleva puesto como una estola, y al cruzarnos en la calle me doy la vuelta y detengo la mirada en su espalda, como si con ese olor suyo se llevase también una parte de mí encimada, ya despegada hace tiempo de mi vida, como uno de esos grandes trozos de hielo desgajados que deambulan por el océano sólo sostenidos por las dos miradas que lo perdieron y ahora lo velan.

De aquella relación lo único que se conserva intacto, tras la corrupción del desencanto y el camino tan largo que regresa del amor eterno, es ese perfume que todavía me agita cuando me lo cruzo por la calle una década después. Todo lo que trae el viento es bueno; no hay paraíso más resistente que el de los dieciocho años. A mí me deja sentado en el parque de Las Palmeras, me trae de golpe a la cabeza los minutos insólitos que dedicamos en silencio a estar juntos, y me devuelve finalmente bajando A Caeira dándole patadas a las piedras pensando en escribir algún día la historia del desaliento que me empezaba a enfriar la sangre mientras esperaba una de esas olas gigantes de las que se tienen noticia un año antes de que caiga arrasándolo todo.

El día en que se acabó cumplí de repente tres años seguidos, y cuando pretendí volver atrás, no a por ella sino a por mí, no recuperé más que aquel perfume y la piedra sepulcral sobre la que escribí, a modo de homenaje, un epitafio de amor. No se sobrevive a las mujeres. Las lleva uno colgando del corazón como esas latas que se ponen en los tubos de escape de los coches de los recién casados y acaban dejando un muro en mitad de tu vida separando lo que eres de lo que fuiste. Y si me quiero recordar, si quiero tirar de mí hacia atrás para regresarme, no acudo a las fotos sino al perfume, y me sorprendo arrinconando aromas, sorbiéndolos al vuelo como un animal marchito saciado de sí mismo, envuelto en heridas de las que sólo mana la felicidad de entonces.

Manuel Jabois




Thinking out loud. Ada Pouseu y Dani Piñeiro

La canción original es intepretada por Ed Sheeran, pero aquí la canta una de mis hijas con un amigo. Espero que os guste.




When your legs don't work like they used to before
And I can't sweep you off of your feet
Will your mouth still remember the taste of my love?
Will your eyes still smile from your cheeks?

And, darling, I will be loving you 'til we're 70
And, baby, my heart could still fall as hard at 23
And I'm thinking 'bout how people fall in love in mysterious ways
Maybe just the touch of a hand
Well, me—I fall in love with you every single day
And I just wanna tell you I am

So honey now
Take me into your loving arms
Kiss me under the light of a thousand stars
Place your head on my beating heart
I'm thinking out loud
That maybe we found love right where we are

When my hair's all but gone and my memory fades
And the crowds don't remember my name
When my hands don't play the strings the same way
I know you will still love me the same

'Cause honey your soul could never grow old, it's evergreen
And, baby, your smile's forever in my mind and memory
I'm thinking 'bout how people fall in love in mysterious ways
Maybe it's all part of a plan
Well, I'll just keep on making the same mistakes
Hoping that you'll understand

But, baby, now
Take me into your loving arms
Kiss me under the light of a thousand stars
Place your head on my beating heart
Thinking out loud
That maybe we found love right where we are

So, baby, now
Take me into your loving arms
Kiss me under the light of a thousand stars
Oh, darling, place your head on my beating heart
I'm thinking out loud
That maybe we found love right where we are
Oh, baby, we found love right where we are
And we found love right where we are

30 comentarios:

David dijo...

La foto está bien. El texto no me va mucho (pero bueno, tampoco está mal; será que nunca he puesto latas en los tubos de escape de los coches)... El cover de tu hija y su amigo está muy bien.
Buenas noches.

Genín dijo...

Difiero, yo he sobrevivido...
Me llama la atención la pronunciación de los chicos, la voz de la niña me encanta!!!
Besos y salud

Blue dijo...

David, la foto original es de cuerpo entero, esta está cortada. No sé si se debe hacer eso, pero como me la encontré así...jajaja. Bueno, es de un gran fotógrafo mexicano.
Besos.

Genin, es literatura. El que lo cuenta también está vivito, jaja.
Hoy hay muchas maneras de aprender inglés y la verdad es que, trabajo aparte (hay que emplearse), la red les da la oportunidad de comunicarse de verdad con gente de otros países, y ahí se aprende bastante.
Besos y salud.

Il Gatopando dijo...

Esta entrada viene bien cargadita, ¿eh? No sé qué pasa con Manuel Jabois que últimamente aparece a babor y a estribor, por proa y popa. Fernando Pessoa es más escueto y, sí, menos romántico. Él lo dice así: "El olfato es una vista rara. Evoca paisajes sentimentales con un dibujar rápido del subconsciente".
Muy bonita la foto y la canción funciona como guinda. Ni que fuera Navidad. Saludos

Blue dijo...

Gatopando, a Jabois ya lo sigo hace tiempo. Hasta hace poco incluso por la acera porque era vecino y compraba en Frutas Nieves, "de fruta madre", igual que yo, jaja.
Tenía un blog, que cerró a los comentarios más o menos cuando se fue a El Mundo, que era pura dinamita.
Este escrito ya es de hace años, ahora politiquea más, pero a mi me encanta su estilo mezcla equilibrada de periodista y escritor.
Pessoa siempre acertado.
;-)
Saludos.

Yeka dijo...

A mi me ha gustado este texto. y creo que si algunos no sobreviven de las mujeres, algunas no sobreviven de algunos hombres. Aunque de alguna manera siento, muy en el fondo o quien sabe bien afuera, un poco de susto por eso.
Un abrazo!

Errata y errata dijo...

Maravilloso. Todo. Texto, voces...y vos.

Blue dijo...

Yeka, son solo palabras. Podemos no hacerles caso.
;-)
Besos.

Maia, graciaaaaasss...

Doctor Krapp dijo...

Como me encanta, Jabois. En la actualidad es mi articulista favorito. Y hay que ver lo bien que lo has sabido combinar con esa hermosísima foto y esa bella canción.
Felicidades, Selo.

Blue dijo...

Krapp, a ver se vai ser cousa da terriña, jaja.
Bicos.

mariajesusparadela dijo...

La foto me encanta. El texto me gusta mucho y la voz de tu hija es un regalo.

Blue dijo...

Gracias, Mariajesús, alégrome.
;-)

Gata Chopada dijo...

He coincidido en lo del acento, tu hija canta fenomenal -bueno, y el amigo tb-, y en lo de que la entrada viene cargadita.
Yo amo a Jabois, ya lo sabes. Le amo tanto, que cuando está él, está sólo él.
Pero tu hija son palabras mayores, luego, ¡no puedes poner dos superprotagonistas juntos!!, hombre, hombre.
Besuchones.

Gata Chopada dijo...

Ayyyy!! He demostrado que no soy un robot. Jajajajaja ¡os he engañado!

Mira, mira otra vez...

Carmela dijo...

La voz de tu hija tiene un timbre especial y no es por decir, Blue, ya la primera vez que la oí te lo dije, me encanta, así que en esta ocasión me quedo con ella y la foto. Besos y bicos.

Blue dijo...

Gata, seguramente mi hija cante mejor que Jabois, pero nada más. Ya sabes que a mí Jabois también me encanta, por algo lo tengo desde hace tiempo en el blogroll, desde cuando era solo un periodista de provincias y hablaba de las cositas de aquí, jaja.

¿A que fastidia lo del robot? Me gustaría poder quitarlo, pero ahora parece que blogger ya lo puso de serie y no hay manera.

Bicos.

Gracias, Carmela, te quedas con las adolescentes, jaja.
Besos.

Frankie dijo...

Una voz preciosa la de tu hija, Selo. Del Manuel Jabois ese no sé practicamente nada, así que me fiaré de lo que dices. Pero tu hija posee ya un tirón musical y romántico que pa qué. Seguro que se llevará de calle a los mozos de Pontevedra. Y se sobrevive a cualquier cosa, el tiempo lo borra todo, mamá Blanco, jajaja.

Besos.

Blue dijo...

Frankie, en-cant-Ada de conocerte, jajaja, muy amable. Cantar es un vicio sano que espero que le dure mucho.

Jabois se hizo más conocido cuando hace dos años fichó por El Mundo. Ahora acaba de pasar a El País, pero hasta entonces era un periodista de provincias al que solo conocíamos algunos de aquí.
Este texto es literario, pero en el periódico tiene más chicha política. Tengo su blog "Apuntes en sucio" enlazado hace tiempo, aunque ahora como ya cerró comentarios simplemente pone los artículos del periódico.
A mi siempre me pareció muy bueno, así que su ascenso meteórico no fue sorpresa.

Se sobrevive a todo menos a la muerte ¿verdad? Necesito optimistas como tú, jaja.

Besos.

D.F. dijo...

El olor es un sentido más, en muchas ocasiones muy activo... en un sentido menos emocional y más carnal, si se me permite el atrevimiento..

Blue dijo...

Temujin, no lo sé. A mí me cuesta memorizarlos, me resulta más fácil evocar sensaciones en conjunto que el olor en sí. Eso excepto alguno que lo tengo muy interiorizado como el del salitre del mar, jaja.
Besos.

Darío dijo...

Me encantó. Como la música, siento que el olor es lo único capaz de transportarnos al infinito. También nos paraliza. Pensar que el olor de todo lo perdido nos sigue estremeciendo. UN abrazo.

Blue dijo...

Darío, deberíamos poder seguir el rastro como los perros. O no, casi mejor que no, jaja.
Besos.

Blue dijo...

Darío, deberíamos poder seguir el rastro como los perros. O no, casi mejor que no, jaja.
Besos.

Cheli dijo...

Tengo que felicitarte!!!!
Tu hija tiene una voz impresionante, me encanto!!!

Y si, se sobrevive, aunque te queda algo....en este caso el perfume...

Besos!!

Blue dijo...

¡Cuánto tiempo, Cheli!, ya había perdido tu rastro, jaja.
Muchas gracias. Mira, hoy mismo publicó otra. A ver si te gusta: esta

Besos.

Cheli dijo...

Me encanta!!!!
Te felicito una vez más, que voz!!!
No tengo palabras....

Besotes.

Blue dijo...

Muy bien, Cheli, hasta repetiste, jaja.
Mira en el canal, porque creo que ya puso otra más.
Besos.

India dijo...

Parecería que 'tocas' tres de cinco. Parecería, digo.
Uno: La vista (fotaza, de mis favoritas de un favorito. Perdí parte del almacén de archivos donde la contenía)
Dos: El oído. Paro a Robert Smith y sus compis para darrle play a tu Ada (que cómo me gusta, ya te dije en una ocasión, esa zona que se queda como para ella en mitad de la garganta...)
Tres: El olfato. En lectura, pero despliegue olfativo que un grande sabe hacer. Lee los olores, te dice. Porque sabe hacerlo conseguir.

Parecería que 'tocas' tres de cinco. Pero 'tocas' y lo haces suave. Ya diste al cuarto su ser, tacto. Y queda una con la boca húmeda y la sensación en barriguita de colmar lo preciso, sin desbordar. Cinco, sabor.

Enhorabuena por cómo cocinaste, enhorabuena por tu saber hacer de lo mejores ingredientes, el más delicado de los platos. La sensación, siempre etérea, el más delicado de los platos.
Achuchones, Blue.

Blue dijo...

Indiaaaaa, qué bueno que viniste!!!, jajaja. Muchas gracias. Me alegro mucho de leerte. Los cinco sentidos me despertaste también, jaja.
¡Achuchones!

Isabel dijo...

El primer poema, es precioso. Es muy tierno, es real.